Bienvenidos a Villa Pitaya
Un jardín mágico y una historia que se respira en cada rincón
Villa Pitaya no es solo un alojamiento, es un lugar con alma. Construida hace más de 200 años tras la última gran erupción volcánica en Lanzarote, este rincón fue levantado piedra a piedra por quienes cruzaron el mar buscando un nuevo comienzo. Se asentaron en Lajares, donde eligieron cuidadosamente esta ubicación: un terreno fértil, junto a una gran palmera centenaria y un pozo natural que recogía el agua de lluvia de las montañas. Así nació Villa Pitaya, un refugio de amor, paz y vida.
Hoy, ese espíritu permanece vivo en cada uno de sus espacios. Villa Pitaya cuenta con un jardín mágico y varios apartamentos turísticos distribuidos alrededor de este paraíso natural:
Todos comparten el acceso a un exuberante jardín con árboles frutales, una piscina comunitaria, espacios para yoga y rincones llenos de calma. Aquí cada huésped puede reconectar con lo esencial y disfrutar del verdadero ritmo canario, rodeado de historia, naturaleza y sencillez.